diumenge, 3 de febrer del 2019

ELS DILLUNS DELS DRETS HUMANS: CAP A UN 8 DE MARÇ DINS L’ESGLÉSIA

 
Fa un any el 8 de març va suposar un punt d’inflexió en la lluita feminista a casa nostra. Aquesta revolució que s’està donant a la societat està costant més que penetri també a l’Església. Són moltes les qüestions obertes que l’Església hauria d’afrontar si no vol quedar al marge dels processos socials i polítics clau que s’estan donant en la nostra societat en aquest camp. De quina manera avançar cap a una igualtat efectiva també dins l’Església?
Ponents:
  • Viqui Molins. Religiosa teresiana, activista i impulsora d’iniciatives socials.
  • Neus Forcano, filòloga, professora de Llengua i Literatura i membre de l’Associació Europea de Dones per a la Recerca Teològica (ESWTR)
Modera:
  • Montse Santolino, periodista i responsable de comunicació de Lafede.cat
Dilluns 4 de febrer, 19h
Sala d'actes de Cristianisme i Justícia - Roger de Llúria, 13

La precarietat laboral a les dones

 

Más precariedad y desigualdad laboral para las mujeres

La última EPA demuestra que las mujeres tienen peor calidad en el empleo y en el desempleo.

Tras la publicación de los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), correspondientes al cuarto trimestre de 2018, la Unión General de Trabajadores denuncia que la desigualdad y la brecha de género no solo se mantienen en nuestro mercado de trabajo, sino que, en algunos casos, incluso incrementan.
Según la estadística, el desempleo ha aumentado en 13.800 mujeres en este trimestre y la tasa de paro femenina sube hasta el 16,26%, cuatro centésimas más respecto al trimestre anterior.
Además, la brecha de género en el desempleo se mantiene en 3,39 puntos porcentuales, con 156.100 mujeres más que hombres en el desempleo y habiéndose reducido el número de hombres en paro en mayor medida, lo que significa que el desempleo masculino se reduce mucho más rápido que el femenino. Para UGT, la inestabilidad laboral sigue castigando más a las mujeres que a los hombres.
Por sectores, destaca el incremento del paro femenino en la industria un 10,86%, justo lo contrario que ocurre con el masculino, que se ha reducido en este sector un 7,12%. Para UGT, esto puede significar una sustitución de empleo femenino por empleo masculino en este sector, lo que resulta alarmante dado que es precisamente el sector industrial el que tiene la tasa de paro más baja para ambos sexos.
Además, en el sector servicios, el empleo masculino se ha reducido con mayor intensidad que el femenino, por lo que, incluso en sectores altamente feminizados, los hombres salen del desempleo con mayor facilidad que las mujeres.
En relación al paro de larga duración, se reduce de forma significativa para ambos sexos, pero con mayor intensidad entre los hombres, algo que para UGT es totalmente paradójico, ya que los hombres son menos representativos en este desempleo de larga duración que las mujeres.
Con las cifras en la mano, queda demostrado que las mujeres tienen más difícil su acceso al empleo que los hombres y tienen peores trabajos (y menos remunerados). Aunque algunos lo pretendan ignorar, la brecha de género persiste tanto en el empleo como en el desempleo, con importantes desigualdades en las prestaciones y subsidios por desempleo.
Por todo ello, UGT refuerza su compromiso con la eliminación de todas las formas de discriminación contra las mujeres y reclama políticas activas inclusivas para este colectivo. Es preciso aplicar un enfoque de género a todas las políticas, que permita combatir la desigualdad persistente con medidas hacia un empleo de calidad con derechos y mejora en la protección social para las mujeres. Solo así conseguiremos avanzar hacia una sociedad más igualitaria, justa y democrática.

Fuente: nuevatribuna.es